viernes, 28 de marzo de 2014

PARAGUAY: Mega proyecto porcino da otro paso firme


PARAGUAY : En menos de dos años, el emprendimiento porcino de varias cooperativas ya apunta a su primera faena en el segundo semestre del 2014. Con más de 16 millones de dólares en inversión global, la iniciativa entra en su segunda fase, con la operatividad de su Unidad Productora de Lechones, en Naranjal (Alto Paraná).
Siguiendo estrictamente su cronograma de actividades, desde aquella asamblea en noviembre del 2010, la Alianza Comercial e Industrial Cooperativa S.A. (ACICSA) no paró en sus tareas del proyecto que se cristalizó en agosto del 2010, con la inauguración de su Unidad Productora de Matrices (UPM), en San Cristóbal (Alto Paraná). Ya para setiembre se dio otro paso al incorporar matrices uruguayas.
Ervile Darcin, presidente de ACICSA.Ervile Darcin, presidente de ACICSA.
Así las cinco cooperativas Pindó (San Cristóbal), Copronar (Naranjal), Cooperalba (Puente Kyjha), Raúl Peña (Raúl Peña) y Unión Curupayty (Santa Rosa del Monday) siguieron sin pausa su caminar. La importación de genética Delta híbrida permitió establecer la base con la que luego siguieron las actividades, la primera partida sumó unas 750 matrices. Ya para entonces, a la inversión inicial de 3 millones de dólares, se sumaron otros 5 millones de dólares más con nuevas infraestructuras.
Para la UPM se establecieron criterios extremadamente cuidadosos según las exigencias de bioseguridad, entre ellas mantener un área aislada y con permanentes controles. Un minucioso plan de manejo interno se ejecuta y solo el personal autorizado puede ingresar y realizar las tareas. Es un predio de al menos 7.500 m2 de superficie bajo techo.
Vistas de las instalaciones de la UPM.Vistas de las instalaciones de la UPM.
La siguiente fase apunta a la Unidad de Producción de Lechones (UPL), en Naranjal, que es actualmente la instancia en donde también se cumplió con las estimaciones y los primeros lechones productos de la UPM con sus madres ya fueron trasladados. En la UPL existe una infraestructura para recibir un total de 2.500 hembras con sus crías. Hasta el momento llevan unas 550 matrices, de las cuales 100 ya están servidas, informó Ervile Darcin, presidente de ACICSA.
Para esta unidad se construyeron unos 14.000 m2, que demandó otros 5 millones de dólares. En su punto más alto se aguarda una producción de 75 mil lechones por año, que requiere de unos 45 galpones, con una media de 500 cabezas por galpón. Aquí es donde entrará el socio cooperante, para la tercera y última fase, el engorde, bajo la figura de cadenas de producción o clusters.
Las medidas de bioseguridad son estrictas en el establecimiento.Las medidas de bioseguridad son estrictas en el establecimiento.
La entrega sería de un animal con 25 kilogramos en promedio. El socio cooperante debe proveer todo lo necesario para el engorde, durante 100 días y, de ser posible entregar un cerdo con 120 kilogramos listo para enviar al frigorífico. “ACICSA se basa sobre un cronograma de trabajo establecido desde el principio. Ahora estamos en un ordenamiento interno para armar el sistema de cluster que vamos a trabajar, con distribución de lechones, de balanceados, la asistencia técnica y todo lo que el productor requiera”, explicó el entrevistado.
Indicó que la actividad mantiene su dinamismo y la UPM “está totalmente cargada y en plena producción. De ahí se destinaron las primeras hembras híbridas para la UPL en Naranjal, donde se van a producir lechón. Ya tenemos instaladas en Naranjal unas 550 matrices, de las cuales 100 hembras están servidas y los lechones van a ser distribuidos a los socios”. Esa entrega está fijada para mediados del año, hacia junio.
En una primera distribución se contempla destinar 1.500 lechones mensuales. “Esto va a beneficiar a 3 productores con módulos de 500 animales. La idea es ir incorporando más productores para que en el 2015 estemos llegando a 2.500 hembras que es la capacidad de la UPL en Naranjal”, explicó.
Faena y mercados. El corolario de todo el emprendimiento apunta a generar más producción y diversificar las granjas. Ello implica llevar a feliz término la entrega de los cerdos para su faena y comercialización.
En ese sentido, Darcin se mostró optimista en completar los pasos trazados. “Si miramos un cronograma de desarrollo de la genética, se puede ver que está programada para finales del mes de octubre o noviembre, la primera faena de los primeros lechones. Con el paso del tiempo apostamos a lograr la meta final del proyecto de alcanzar los 75 mil cerdos por año”, subrayó.
Agregó que las cooperativas vinculadas a la actividad igualmente son accionistas del frigorífico de cerdos, Unión de Productores de Itapúa S.A. (UPISA) y que ahora se está discutiendo algunos detalles. Además, UPISA es el frigorífico habilitado para exportar carne porcina y que seguramente una vez que se tenga la mercadería y el volumen también se podrá diseñar la estrategia de venta al exterior, no sea que se reciban los pedidos sin poder satisfacer la demanda. “UPISA tiene los mercados y también estaremos ofreciendo al consumidor local a finales del año los resultados de la primera producción del emprendimiento”, concluyó.

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