Si Mahoma no va a la montaña, la montaña va a Mahoma… dice el refrán, y ante tanto pedido de unidad desoído desde diferentes ámbitos productivos y empresariales hacia el gobierno; 29 organizaciones empresarias realizaron el primer encuentro de lo que bautizaron: Foro de Convergencia Empresaria; del cual formaron parte las entidades vinculadas al sector agropecuario.
Sucedió luego de una semana clave en materia de giro económico. La devaluación del 15 %, la inflación, la repentina apertura del cepo cambiario para el ahorro de los ciudadanos y la incertidumbre de tanto revés con tan poca explicación que la contenga. Sin embargo, el encuentro fue más allá. No se ocupó de esta coyuntura, ni se expidió sobre ella. La convergencia está viendo el largo plazo; el empresariado se convocó para conformar un espacio de diálogo que genere propuestas para el desarrollo del país.
"Un país en el que sus fuerzas productivas, sociales y políticas operen en un marco de creciente fragmentación no puede progresar como Nación y está llamado a desgastarse en la confrontación perpetua entre sus partes", señala el documento que emitieron y refuerza: “Sólo así podrá contribuirse, desde el área empresarial a ratificar el valor de un proyecto nacional perdurable en el tiempo, socialmente fructífero e inclusivo e institucionalmente inequívoco”.
Más allá de expresar la necesidad de unidad, las organizaciones definieron comenzar a trabajar en un diagnóstico que sirva para articular con el ámbito político. En este sentido se dio una de las mayores apuestas ya que los integrantes del encuentro pretenden sumar a la convergencia a las fuerzas sindicales. “Es intención de este foro trabajar junto a todas las fuerzas políticas presentes y futuras para consensuar un acuerdo de cumplimiento programático en este mismo año”, explicitaron quienes volverían a reunirse el 20 de febrero para profundizar el debate.
“El Foro de Convergencia Empresarial debe contribuir con sus propuestas a delimitar responsabilidades y roles, precisar los contenidos sociales, institucionales, culturales y económicos que integren las respectivas fuerzas políticas del mencionado acuerdo de cumplimiento programático. Complementará con esa labor insoslayable las iniciativas de los equipos profesionales que, en cada una de esas áreas, integren las respectivas fuerzas políticas para la construcción de las mejores políticas públicas”.
El debate y la unidad se extienden en la práctica como una propuesta concreta desde un poderoso motor de la economía -ya no sólo el agropecuario- hacia el Estado. Es una iniciativa clave, habrá que ver si lograda esta convergencia hay permeabilidad y escucha para hacer efectiva la labor. Caso contrario la marca será para quien tome la posta en 2015.
Agro-noticias.comAlejandro Cánepa
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