Productores brasileños niegan la existencia de un cartel dentro de la cadena cárnica del país

Continuan las pesquisas de la Subcomisión para Combatir la Cartelización del sector Agropecuario en Brasil, perteneciente a la Comisión de Agricultura, Ganadería, desarrollo Rural y Abastecimiento del país, y fruto de ello, en la comparecencia de Ricardo Pinto, presidente de la Unión Nacional de Productos para la Salud Animal de dicho país, este ha declarado [...]

Continuan las pesquisas de la Subcomisión para Combatir la Cartelización del sector Agropecuario en Brasil, perteneciente a la Comisión de Agricultura, Ganadería, desarrollo Rural y Abastecimiento del país, y fruto de ello, en la comparecencia de Ricardo Pinto, presidente de la Unión Nacional de Productos para la Salud Animal de dicho país, este ha declarado que no se ha conformado unc artel dentro de la cadena cárnica brasileña.

Según Pinto, en Brasil hay empresas fuertes “activas en su labor y en un mercado muy feroz. Tienen localizaciones muy diferentes y la competencia en temas de precio y oferta es muy fuerte. Si hablamos de productos biológicos y de vacunas hay entre 8 y 10 empresas que venden la vacuna para la fiebre aftosa por lo que no hay cartel y nunca ha sido probada su existencia ya que, simplemente, no existe”.

Otra de las personas que ha declarado en la Subcomisión ha sido Antonio Camardelli, presidente de la Asociación Brasileña de empresas Exportadoras de Carne (Abiec), quien sugirió que debe haber más cercanía entre el ganadero y la industria cárnica para competir con las grandes cadenas que comercializan la carne dentro del comercio minorista.

Camardelli también negó la existencia de un cartel: “la gente quiere llamaar la atención sobre un problema que no vivimos dentro de la cadena productiva. La situación más favorable es aquella en la que todos ganamos o perdemos. Tanto ganaderos como industriales estamos frente a la distribución comercial que es quien mayor margen se lleva”.

Por su parte, Moreira Mendes, presidente de la subcomisión ha explicado que esta investigación interesa sobre todo a los ganaderos y también a los diputados brasileños ya que tienen el deber de supervisar.