Las elevadas temperaturas y ausencia de precipitaciones significativas en las regiones productivas centrales de Estados Unidos continuaron proveyendo mejoras en el mercado de Chicago. La plaza ya había descontado un muy buen escenario productivo y en el curso de estas últimas semanas el panorama se complicó, sin que ello implique por el momento pérdidas de importancia en la productividad proyectada.
En el curso de la semana anterior la revista Pro Farmer especializada en temas agrarios, realizó su habitual recorrida anual por los principales estado productores de Estados Unidos y así llevar a cabo su relevamiento. Para maíz, Pro Farmer proyecta una campaña norteamericana 2013/14 de 341.9 millones de toneladas, con rendimientos por hectárea de 9.672 kilos.
Para soja, los especialistas estimaron una producción de 85.9 millones de toneladas, con rendimientos promedio nacionales de 2.811 kilos por hectárea. Ambas proyecciones fueron estimadas asumiendo clima normal en el curso de septiembre.
Las estimaciones de ambos cultivos difieren bastante de las realizadas recientemente por el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) en su informe revelado el 12 de este mes. En este reporte, el USDA proyectó una campaña de 349.6 millones de toneladas de maíz y de 88.6 millones de toneladas para soja.
Es probable que el USDA vuelva a recortar sus cifras de producción en el informe del mes entrante, aunque en general se opina que las reducciones que se podrán observar en ese reporte no resultarán tan marcadas como las reveladas por Pro Farmer el viernes último.
Lo cierto es que los datos de Pro Farmer impulsaron fuertemente al alza a ambos mercados en el arranque de la semana, dada la credibilidad que goza el tour en la opinión de la mayoría de los operadores. Desde los mínimos que se registraron para la soja noviembre en Chicago, el 7 de este mes, y hasta la fecha, el mercado sumó casi u$s 90 por tonelada, alcanzando nuevamente las cotizaciones que se registraban en el otoño boreal. Todo en solamente 15 ruedas.
Cultivos
El USDA anunció esta semana que los cultivos de maíz en situación “buena a excelente” alcanzan al 59%, en comparación con un 61% de la semana anterior y el 22% del año 2012 a esta fecha.
En relación con la soja, destacó que los cultivos “buenos a excelentes” llegan al 58%, en comparación con un 62% de la semana anterior y el 30% del año pasado.
El trigo de primavera “bueno a excelente” abarca al 67%, en comparación con un 66% de la semana anterior.
Ya se encuentra cosechado el 42% del área prevista, en comparación con un 18% de la semana anterior y el 54% del promedio de las últimas cinco campañas.
Se estima que en la presente temporada, las importaciones de maíz por parte de China crezcan sostenidamente en relación con lo acontecido en campañas anteriores. Si los pronósticos privados se cumpliesen, las importaciones chinas de este producto superarían a las de México y Corea del Sur, ubicando a este país como el segundo exportador mundial detrás de Japón.
El crecimiento en su demanda interna obedece al sostenido crecimiento de los precios locales y a la creciente demanda doméstica de carnes. No existen problemas con la actual cosecha de maíz en China. Por el contrario, se aguarda un nuevo crecimiento productivo, que constituiría el décimo consecutivo, a pesar de la sequía reinante en algunas regiones productivas del sur del país.
Se espera que China supere el récord productivo de la campaña precedente, que totalizó 589.6 millones de toneladas de granos. Esta nación cuenta con una superficie arable de 122 millones de hectáreas y en esta temporada la cosecha resultaría superior a la del año anterior -no obstante encontrarse comprometidas alrededor de 7 millones de hectáreas- como resultado de un incremento en el área de siembra y la abundancia de créditos oficiales.
Los precios del maíz en los principales centros de consumo de esta nación rondan los u$s 390 la tonelada, en tanto que los precios para diciembre por mercadería puesta en puertos chinos se encuentra en niveles de u$s 255 por tonelada, lo que estimula consistentemente la actividad de importación para el engorde de animales, principalmente cerdos, actividad que crece a una tasa anual de entre un 7% a un 8%.
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