Hay producción, en exceso, y pocos son los que compran. El resultado: una caída hasta los 26 dólares por saca de 205 libras de arroz en cáscara (paddy).
La baja ha sido de a poco. El precio oficial es de 35,50 dólares, el valor con el que compra la Unidad Nacional de Almacenamiento (UNA EP), pero entre esta y la semana anterior la saca se cotizó, en piladoras, a 30 primero, 28 después y 26, cuando hay quien compre.
En Babahoyo, los arroceros no tienen a quién entregar. Tampoco les reciben el producto en las piladoras de Jujan o de Yaguachi (en Guayas).
Gonzalo Espinel, presidente de la Junta de Riego Babahoyo, dice que la situación es crítica, pues en la zona (vía Montalvo-Babahoyo, Los Ríos) también se han inundado algunas hectáreas recién sembradas y otras por cosechar y eso que “recién empieza la creciente”.
Ese factor pesa mucho. Según la industria, la llegada de las lluvias ha hecho que los agricultores cosechen antes de tiempo. Eso implica granos verdes y húmedos, por tanto, de mala calidad. Hasta 18 % de partidos. “El bajo precio es también por la baja calidad”.
Pero hay más aspectos: los elevados inventarios de las piladoras como consecuencia de la baja liquidez de los compradores y la restricción de compra por parte de los mayoristas que esperan ver cuánto más baja el precio para poder comprar. Estos no están dispuesto a perder dinero al comprar caro y vender barato.
La UNA ha entrado a comprar. En lo que va del año 153 agricultores se beneficiaron de la compra directa de arroz en cáscara realizada por la empresa pública a través de las plantas de silos fijos de Daule (Guayas) y Babahoyo (Los Ríos). La empresa captó 5.254 toneladas métricas, hasta la tarde de este 17 de enero.
“Debido a los recientes aguaceros, los productores cosechan durante los días de fuerte sol, aun de forma anticipada, para evitar el deterioro del grano a causa del invierno”, confirma la entidad.
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