viernes, 10 de septiembre de 2010

“La dirigencia empresaria que cumple con la ley debe decir: así no queremos seguir”

Así lo indicó el diputado Adrián Pérez en el Congreso CREA 2010; “Nos tiene que doler bastante lo que le pasa a la Argentina para poder cambiarla”, apuntó
“Hace mucho tiempo que vengo escuchando la frase de que la Argentina tiene un potencial enorme; tenemos que dejar de pensar en eso para empezar a construirlo, y para eso tenemos que adquirir un fuerte compromiso entre distintos actores, y tiene que hacerse en forma compartida entre trabajadores, empresarios y políticos”.

Así lo indicó Adrián Pérez, diputado por la Coalición Cívica, durante una conferencia ofrecida en el Congreso Nacional CREA 2010 que se está desarrollando en la ciudad de Córdoba.

“Tenemos que salir de la cultura de la trampa, el engaño, la mentira, la violación de la ley y al hecho de que el éxito económico esté en muchos casos vinculado con esas prácticas; en estos años he tenido que hablar con muchos empresarios que hacen las cosas bien, pero en todos existe la creencia de que lo que impera son las malas prácticas; hay que romper esa cultura para ir hacia un nuevo paradigma”, añadió.
“Quién cumple con la ley debe ser premiado y quién no debe tener sanciones. Para esto se requiere un enorme compromiso de la dirigencia política, pero también de la empresarial, porque o cambiamos el paradigma o seguiremos siendo un país con un enorme potencial”, expresó, para luego agregar que “a muchos sectores que no cumplen la ley les va bien y esto requiere la voz de la dirigencia empresaria que sí cumple y que debe decir así no queremos seguir”.

“No hay ciudadanía si el 40% de la población argentina está pasando hambre. Es cierto que el Estado tiene un mayor nivel de responsabilidad; si para venderle a Venezuela le dicen a los empresarios que tienen que pasar por un intermediario que le cobra el 15%, el responsable de eso es el funcionario público, pero también el empresario que acepto eso”, comentó Pérez.

“Hay algo extraño que ocurre con el sector empresario argentino: si es grande hay que castigarlo; si es chico se tiene que quedar chico. Pero esto no debería ser así: si es chico tiene que tener incentivos para ser mediano y el mediano para ser grande y el grande tiene que aspirar a ser global. Tiene que haber estímulos. No deben ser castigados”, señaló.

“A veces me dicen que cuando tengas el cuero bien curtido vas a estar listo; esta idea que nos transmiten a quienes hacemos política yo no la creo, porque nos tienen que afectar las críticas y los golpes; tanto el dirigente político como el empresario es conveniente que tenga la piel fina, que sienta el golpe o la critica y que en definitiva le duela; nos tiene que doler bastante lo que le pasa a la Argentina para poder cambiarla”, finalizó el diputado.

Por su parte, el diputado Héctor “Toti” Flores (Coalición Cívica; Buenos Aires) recordó que fue “un trabajador metalúrgico y hubiese sido mi sueño jubilarme como trabajador metalúrgico; quedé desocupado; fue piquetero y después emprendedor; ahora soy político”.

“Cuando salimos a la calle por quedarnos sin trabajo acusábamos a los empresarios de ser los responsables de nuestra situación; después comprendimos que sin unirnos con otros actores no podíamos salir de nuestro problema. Pero esos empresarios fueron responsables por no haberse parado frente al proceso de destrucción de valores (de los años ’90), como sí lo está haciendo ahora el campo”, afirmó.

“El problema de las relaciones económicas que nos llevaron a esta situación es que cada uno pensaba en cómo salvarse a sí mismo, pero si pensamos de una manera distinta, en cómo nos salvamos todos, esto cambia”, indicó Flores, quien fue uno de los fundadores de la Cooperativa “La Juanita” de la Matanza, la cual fue creada para brindar trabajo a desempleados de ese partido bonaerense.

“El campo tiene un reservorio de valores fundamentales: la defensa de la cultura del trabajo no como una mercancía que sólo sirve para ganar dinero, sino para sostener al hombre como persona; el otro valor es la educación como una inversión social, que no necesita ser rápidamente recuperada porque se trata de una inversión de largo plazo”, añadió.

“Hay miles de emprendedores que quieren torcer el rumbo del destino; algunos de los bolsos que ustedes tienen en este congreso son de la Cooperativa La Juanita, que podría haber hecho los 5000 bolsos (por la cantidad de asistentes al Congreso CREA), pero se prefirió integrar a otros talleres de Mercedes (Corrientes), San Lorenzo, Concepción del Uruguay, Saladillo; se renunció a la posibilidad de ganar más, pero se consideró más importante integrarse con otras organizaciones”.

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