lunes, 28 de julio de 2014

ECUADOR: Hacienda de Chivería muestra cómo se cría y produce ganado

Hacienda Chiveria¿Cuántos litros de agua al día creen que bebe una vaca? La pregunta genera inquietud entre los asistentes que escuchan la charla interactiva, sentados sobre dos hileras de asientos recubiertos con pasto, que están bajo una pequeña cabaña.
“Creo que toma 20 litros”, “Unos 30”, “Necesitan 50 litros”, se escucha entre los 30 adultos mayores que participan de la actividad, a pocos metros de los corrales donde está el ganado de hacienda Chivería, en el km 32,5 de la vía a Daule.
Es jueves 23 de julio. Orlando Macías, administrador de la hacienda, despeja la incógnita: “Una vaca puede tomar hasta 80 litros al día”, asegura mientras observa los rostros de asombro de algunos miembros de la Fundación Ecuatoriana de Desarrollo Humano.
La visita del grupo es parte de un programa que ejecuta la hacienda, que en octubre cumplió 50 años. Se realiza entre junio y diciembre, con el fin de enseñar el proceso de producción de leche usada para elaborar yogur. A este programa acceden niños de escuelas y adultos mayores, que se registran vía telefónica, Facebook   y  Sitio Webde la empresa.
Beatriz Quijije, visitante de 77 años, no ha estado antes en una hacienda. Su rostro refleja emoción mientras se exhiben recipientes con afrechillo seco, arrocillo, polvillo, harina de palma, maíz molido y harina de soya, que se usan como mezcla para alimentar a las reses lecheras, que también comen pasto.
En esa hacienda hay 800 cabezas de ganado de las razas Jersey, Holstein y ejemplares que han surgido del cruce. Los animales, que producen entre 4.500 y 5.000 litros al día, están distribuidos según la edad.
Toda la leche que se recoge se entrega a la planta situada a menos de 1 km de la hacienda, donde se procesan 35 mil litros diarios de yogur de ocho tipos: gourmet, clásico y otros.
Los asistentes pueden ver de cerca el ganado y con guía participar de la alimentación. Dolores Alarcón, de 72 años, se anima a eso, coge pasto y lo lleva a la boca del animal. “No importa la edad para aprender”, dice sonriente.
Antes conoció que una vaca puede demandar una alimentación que equivale hasta el 10% de su peso, es decir, que si tiene 400 kilos, es probable que requiera 88 libras de alimento.
Durante el recorrido, que dura una hora, se intenta responder a todas las interrogantes. Unos se interesan por conocer sobre cuándo las vacas están listas para procrear, las características de las razas… “Es muy interesante”, asegura Eloísa Mendoza, de 81 años, a quien la visita le trajo recuerdos de cuando vivía en Vinces.

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