El
Ministerio de Asuntos Agrarios, a través de la Dirección Provincial de Pesca,
informa que, por medio de la Resolución N° 87/12,se ha dejado sin efecto
la Resolución N°23/12 del pasado 29 de febrero que establecía una veda
total para
la extracción comercial, artesanal y/o turística de moluscos bivalvos
(berberechos, mejillón, almeja etc.) y gasterópodos (caracoles).
La
prohibición regía en la zona delimitada por los puntos de costa desde Punta
Piedra, al norte de la Bahía de Samborombón, y hacia el sur hasta el limite sur
de la ciudad de Mar del Plata, en toda la zona de costa y dentro de aguas de
jurisdicción provincial.
Al
respecto, el ministro Gustavo Arrieta explicó que desde que "se detectó la marea
roja y establecimos la correspondiente veda, a partir del 29 de febrero pasado,
técnicos de la Dirección Provincial de Pesca conjuntamente con personal del
Departamento de Ficología de la UNLP, realizaron muestreos periódicos en la zona
cuestionada para ir evaluando los niveles de contaminación de las diferentes
especies de moluscos bivalvos y gasterópodos".
"Los últimos dos resultados confirmaron que no hay rastros de toxina paralizante de molusco TPM en las muestras enviadas al laboratorio de SENASA en Mar del Plata, por lo tanto se decidió levantar la veda existente", confirmó el titular de la cartera agraria.
También resaltó que es importante que la población tome conciencia de la necesidad de consumir este tipo de productos en lugares habilitados o luego de la captura enviarlos a analizar a SENASA, dado que los moluscos afectados no presentan alteraciones en su color, olor o sabor, y por eso, es imposible detectar su toxicidad a simple vista. Hay que tener en cuenta además que "la cocción y las conservas no inactivan esta sustancia", concluyó.
"Los últimos dos resultados confirmaron que no hay rastros de toxina paralizante de molusco TPM en las muestras enviadas al laboratorio de SENASA en Mar del Plata, por lo tanto se decidió levantar la veda existente", confirmó el titular de la cartera agraria.
También resaltó que es importante que la población tome conciencia de la necesidad de consumir este tipo de productos en lugares habilitados o luego de la captura enviarlos a analizar a SENASA, dado que los moluscos afectados no presentan alteraciones en su color, olor o sabor, y por eso, es imposible detectar su toxicidad a simple vista. Hay que tener en cuenta además que "la cocción y las conservas no inactivan esta sustancia", concluyó.
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