El Tribunal de Justicia de la Unión Europea dictó sentencia definitiva que favorece a los productores argentinos en el litigio originado por la empresa Monsanto, en relación al cobro de regalías por la soja transgénica RR sembrada en el país. Esta presión se puso en evidencia durante 2005 y 2006 cuando la multinacional trabó embargos a las importaciones en la Comunidad Europea procedentes de Argentina.
La declaración judicial sostiene respecto a la soja RR que “el gen no se expresaba en la harina de soja argentina, principal subproducto del poroto”.
A partir de esta declaración, resulta destacar la acción gremial efectuada por Confederaciones Rurales Argentinas para poner límite a las pretensiones indebidas de la empresa multinacional Monsanto que en el año 2004 aspiraba a una retribución de un dólar por tonelada de soja con una proyección en los tres años subsiguientes de siete dólares por tonelada.
Este reclamo injusto motivó el inicio de una acción gremial, lográndose finalmente el acompañamiento de la Secretaría de Agricultura, Ganaderia, Pesca y Alimentos de la Nacion, esta defendió los intereses de los agricultores argentinos en tribunales internacionales, porque la empresa multinacional no quiso hacerlo ante la Justicia Argentina, en implícito reconocimiento a su infundada demanda, ya que los productores argentinos habíamos cumplido con la legislación vigente.
Quienes desde el 2004 iniciamos esta resistencia a las pretensiones de Monsanto, nos sentimos gratificados por el reconocimiento que la justicia internacional dio a nuestra posición.
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