La provincia recuperó el viejo y jugoso negocio de las veranadas chilenas y finalmente ayer, tras una maratónica reunión, las autoridades de la IV Región de Coquimbo y las sanjuaninas llegaron a un acuerdo. Para definir 2 de los 26 puntos del convenio binacional, el de canon por animal y el tiempo de pastoreo, ambas partes debieron ceder sus pretensiones iniciales para poder resolver que los crianceros de las ciudades de Elqui, Limarí y Choapa pagarán 30 pesos (5,18 dólares) por cabeza de ganado menor, con un tope en esta temporada de 80.000 animales; y de 150 pesos (25,9 dólares) por ganado mayor, con un límite de 2.500 vacunos. Además, aclararon que el depósito será en una cuenta local en pesos y no en dólares, en virtud de algunos requerimientos que exige el Banco Central de Argentina y que hubieran dilatado la apertura de una cuenta en moneda estadounidense.
Así las cosas y tras 11 años, entrarán por veranadas a San Juan unos 2.775.000 de pesos, dinero que ahora deberá decidirse cómo se distribuirá entre la provincia, el municipio calingastino y Gendarmería Nacional (hace más de una década fue 50%, 28% y 22%, respectivamente). En tanto que el periodo en que el ganado chileno podrá estar en suelo calingastino se extenderá entre 15 de noviembre al 31 de marzo.
La negociación no fue un trámite. Al contrario, las autoridades vecinas, encabezadas por la jefa de la División de Planificación y Desarrollo Regional del Gobierno Regional de Coquimbo, Claudia Rivera Rojas, pusieron sobre la mesa sus pretensiones con la clara intención de bajar los 6 dólares iniciales que San Juan propuso, y llevar ese canon a 3 dólares. Al término de las ponencias, los 5,18 dólares fue el monto aceptado por las partes y que, a priori, dejó más satisfechos a los sanjuaninos, aunque por lo bajo un funcionario local explicó que ‘’con lo que vale un fardo de pasto, pagar 30 pesos para que pasten toda la temporada es una ganga’’.
También trataron de buscar un equilibrio en el periodo de veranadas. Inicialmente, allá por junio, habían acordado que sería entre el 1 de diciembre y el 31 de marzo, pero luego los crianceros del vecino país se quejaron y le trasladaron la inquietud a las autoridades haciéndoles saber que pretendían que se inicie el 15 de octubre y termine el último día de abril. Al fin y al cabo, sólo se resolvió modificar la fecha de inicio, que será el 15 de noviembre.
‘’En todo momento se trató de llegar a un entendimiento y es lógico que para ello ambas partes debieran ceder, pero entendemos que fue algo que terminó conviniendo a las dos regiones. Lo más importante es que vuelva a tener un marco regulatorio esta actividad tan importante para Chile, pero sin descuidar los derechos sanjuaninos’’, dijo la secretaria de Relaciones Institucionales del Ministerio de Gobierno, Elena Peletier. Por su parte, Rivera Rojas, precisó que ‘’es indispensable que nuestros crianceros puedan trasladar sus animales a Calingasta porque en nuestra tierra llevamos 8 años de sequía que están complicando la calidad de las pasturas y poniendo en aprietos a esta actividad centenaria’’.
En cuanto a la logística necesaria para que el dinero de los crianceros de la IV Región termine en la cuenta del Banco San Juan -en moneda argentina claro-, quedará a cargo de las autoridades de Chile que deberán disponer de los mecanismos para recoger el dinero (que estará atado a la declaración jurada que indique, entre otras cosas, los animales que cruzarán a suelo sanjuanino), cambiarlo por pesos argentinos y luego transferirlos a San Juan.
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