URUGUAY : Para el Instituto Nacional de Carnes (INAC), el gran debe de la industria avícola uruguaya es que no desarrolla el mercado de productos procesados. Actualmente todos los que se consumen, son importados.
El doctor Gabriel Costas, especialista de la Dirección de Mercado Interno del INAC, aseguró que la industria avícola uruguaya “tiene una falencia muy grande y son los productos procesados”.
Costas explicó que actualmente la totalidad de los productos procesados de pollo, por ejemplo aquellos como los nugget, son importados.
“Se llevan importados más de 2.000 toneladas de productos (entre ellos rebozados) con una facturación de cerca de US$ 5 millones”, indicó.
“Creo que la industria avícola ganó mucho en lo que es la presentación del pollo en el mercado interno, pero le está faltando explotar el segmento del rebozado para poder crecer más”, aseguró Costas.
Los rebozados ingresan básicamente desde Brasil, pero también entra producto desde Chile, en todos los casos se trata de congelado. En las grandes cadenas de fast food(comida rápida) se manejan con productos rebozados importados, porque no se fabrican en Uruguay, explicó Costas.
Por otro lado, INAC no prevé un incremento fuerte en el consumo de carne aviar, ni tampoco una baja importante.
Los uruguayos están consumiendo unos 20 kilos anuales y el precio del pollo está igual al de hace dos años atrás ($ 60 por kilo). Según el INAC, el precio del pollo mostró una baja de 10,2% en su precio durante el primer semestre de 2013.
Carne vacuna.
Mientras tanto, en carne bovina, el INAC prevé que cierre 2013 con un consumo no inferior a los 60 kilos por habitante al año.
Ahora que Uruguay tendrá una producción entre 2,9 y 3 millones de terneros, Costas cifró sus esperanzas en que desaparezca de la lista de exportaciones el suero fetal.
No es la primera vez que Uruguay tiene un alto porcentaje de gestación y luego se envían a frigorífico hembras gestantes prácticamente a término, porque al productor le sirven los precios. “Hay empresas que en los frigoríficos tienen gente sólo para extraer suero fetal. Por un lado tenemos una buena gestación y por otro, se mandan a frigorífico las hembras preñadas”, criticó el técnico. El ternero casi a término aparece en las carnicerías como bacaray y hubo años en que marcaron una presencia significativa en el mercado interno.
“Esas son las cosas que hay que seguir corrigiendo para seguir aumentando la disponibilidad de carne y que haya tanto para la exportación, como para el abasto interno”, aseguró el experto del INAC.
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