Condenan a cerealera a pagar $ 500.000 por un dilatado incendio

El Juzgado de Faltas de la Municipalidad de San Lorenzo, a cargo de Gabriel Dabove, resolvió condenar a la firma Vicentín con una compensación económica cercana a los 500 mil pesos tras encontrarla responsable del incendio generado dentro de una celda de su predio situado en esta ciudad y lindante con Ricardone. Los hechos se retrotraen al pasado 26 de abril de 2012, cuando en el silo N`10 se produjo una combustión en el cereal que allí se almacenaba. De acuerdo a las pruebas reunidas, Dabove entendió que la agroexportadora incumplió el decreto 209/2008 que regula el sistema de alerta temprana por riesgo ambiental, que versa sobre la obligación de las empresas a comunicar cualquier contingencia que ocurra en un lapso inmediato de tiempo. Ello no ocurrió en la oportunidad, pues el foco ígneo se inició cerca de la medianoche y la comunicación se verificó casi 11 horas después. El magistrado también comprobó que el incidente hizo mella sobre la calidad del aire tanto a los afectados más directos (el personal fabril) como indirectos (vecinos del predio industrial). Respecto del material particulado pudo constatarse que superó, por entonces, la media permitida en dióxido de carbono, óxido de nitrógeno y delfuro de hidrógeno. La sanción pecuniaria fue de 62240 unidades fijas, tal como lo establece la legislación vigente, y se refiere a cada unidad como el valor de un litro de nafta súper despachado en las estaciones de servicios del Automóvil Club Argentino. El sumario instruido consta de numerosas actas y estudios medioambientales ordenados por el municipio, al que se sumó un informe elaborado por el Cuerpo de Bomberos zapadores de San Lorenzo y por Defensa Civil, este último, aportado después de muchos veces de haber sido requerido. Una sanción similar fue dispuesta el año pasado a Alzo Nobel cuando se comprobó que esta industria generó una emanación química, involuntaria según sus directivos, pero reconocida como tal. La resolución del Juzgado de Faltas, fechada el pasado 7 de marzo, fue apelada por Vicentín.