viernes, 5 de abril de 2013

Apuestan a que el precio los ayude a recuperarse

La cosecha no comenzó; el deterioro de las plantas es palpable; las pérdidas están, producto de la larga y fuerte sequía; la incertidumbre sobre los rendimientos es total. Este es el panorama incierto que se vive en la zona productiva sojera que abarca el este de Tucumán y el oeste de Santiago del Estero, área de influencia de la Cooperativa Unión y Progreso, de La Ramada. 

"Se mantiene la previsión inicial de llegar a tener un deterioro, promedio, del 70%, respecto de la estimación inicial. Las plantas recibieron algo de agua de lluvia, pero no sabemos qué producirán", resumió Osvaldo Martínez, presidente de la Cooperativa. "Hay lotes con pérdidas totales; pero también hay otros donde se hicieron buenos manejos y donde las pérdidas no se sentirán con demasiada fuerza", reconoció.
"Los campos que vienen de maíz, y con barbecho, entregarán plantas de soja que expresarán mejor sus características, tal vez arrojen mejores rindes. En los campos que vienen limpios del invierno 2012, sin cultivos, se percibirán las diferencias", acotó el ingeniero Bernardo Luis Frau, vicepresidente de la entidad. En materia de plagas, reconoció que cuando se sucedieron las lluvias se produjo un fuerte ataque de picudos. "Se aplicó toda la gama de agroquímicos para desterrarlos; por eso los costos se fueron por las nubes, porque hicimos muchas aplicaciones", reconoció.
¿Cuándo cosecharán? "Planificamos comenzar a mediados de este mes, mostrando su mayor intensidad hacia finales de abril", dijo Martínez. "El balance económico es complicado; hay muchos productores afectados financieramente. Los costos crecieron en demasía; se esperan menores ingresos por rindes más bajos. Apostamos a que los precios nos acompañen para poder nivelar los números", auguró Martínez.

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