miércoles, 10 de octubre de 2012


Nuevas bajas de precios, con el trigo en la mira

La soja y el maíz local se mueven al ritmo de Chicago. El trigo tiene más dependencia de factores domésticos.
Los precios agrícolas continuaron con otra semana de bajas, a pesar de un cierre positivo el último día de operaciones de la anterior.
Los datos publicados por el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (Usda) en el informe trimestral de stocks fue sorpresa para el maíz. Esto impulsó subas en los precios de Chicago a los niveles máximos de negociación diaria y con contagio a los demás granos donde las cifras no fueron tan alcistas.
El Usda informó stocks de maíz por 25,1 millones de toneladas, debajo de lo esperado por el mercado y del año pasado a la misma fecha. Igual análisis correspondió al trigo mientras que las existencias de soja totalizaron 4,6 millones de toneladas, arriba de lo esperado por el mercado pero debajo del año pasado a la misma fecha.
La poca oferta de los granos de la campaña que está finalizando se contrarresta con el ingreso de la nueva cosecha que genera presión sobre las cotizaciones.
Las bajas externas volvieron a impactar en nuestro mercado, donde la soja fue la más afectada por su dependencia con el mercado de referencia.
La oleaginosa disponible se podía negociar a 1.850 pesos mientras que para entrega en mayo se obtenía unos 325 dólares, ambos valores debajo de la semana anterior donde ya había registrado bajas.
Para los cereales el comportamiento de los precios también fue negativo pero con menos impacto frente a la actividad del sector exportador donde algunos continúan realizando negocios anticipados a buenos niveles.
El trigo es el producto que mayor sostén tiene en los valores por el contexto que tiene el cereal en el mercado interno: la exportación encuentra abierto el cupo para solicitar ROE mientras que el clima preocupa en algunas regiones productoras.
Las recientes lluvias afectaron varias zonas trigueras, con perspectivas de recortes en los rendimientos que podría afectar el número final de la cosecha. Aun sin datos oficiales, para poder lograr un excedente de exportación del orden de los seis millones de toneladas es necesario que la cosecha por lo menos alcance un número de 11,50 millones de toneladas
En el caso de obtener una cosecha menor, el recorte de la demanda será por parte de la exportación, donde algunos participantes por temor al ajuste de la oferta proveniente de menores rindes se mantienen al margen del mercado.
No fueron muchos los que apostaron por el cereal frente a la historia de los últimos años. Pero es una buena oportunidad en materia de precios para financiar la gruesa, que comienza con un buen avance en las siembras y perspectivas climáticas favorables.

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