Langostino: Evalúan cerrar aguas nacionales

La pesquería del langostino en la jurisdicción nacional estaría llegando a su fin para este año, así lo sostienen varias fuentes consultadas, y en ese marco se estima que antes de fin de mes se proceda al cierre progresivo del caladero. La medida que se prevé adoptar es similar a la de años anteriores de [...]

La pesquería del langostino en la jurisdicción nacional estaría llegando a su fin para este año, así lo sostienen varias fuentes consultadas, y en ese marco se estima que antes de fin de mes se proceda al cierre progresivo del caladero. La medida que se prevé adoptar es similar a la de años anteriores de retirar paulatinamente la flota que está operando, permitiendo que completen bodegas, hagan marea completa, y a su retorno a puerto después no puedan volver a despachar a zona de pesca.

Habría una tendencia a la baja en lo que refiere a los rindes de los lances de pesca, y por otra parte comenzaría a aparecer merluza como fauna acompañante, y esto se utilizará como fundamento técnico y biológico para proceder a restringir la cantidad de barcos congeladores en el caladero de aguas nacionales.

Se ha descartado que se ordene un cierre abrupto de la pesquería a partir de una fecha, sino que estaría consensuado que a partir de las próximas semanas se instruirá a la autoridad de aplicación para que no se habiliten nuevos despachos de zarpada, y consecuentemente, a medida que los barcos retornen a puerto a desembarcar sus capturas, tendrán por finalizada la zafra de este año.

Fechas se barajan varias, pero todas las fuentes coinciden que será antes que termine octubre, y las empresas dan por descontado que están frente a las últimas mareas de sus tangoneros en aguas que administra la Nación.
En Chubut, las empresas aspiran a que se proceda en el corto plazo a efectuar una prospección comercial en aguas provinciales del Golfo San Jorge, y sobre la base de esos resultados evaluar una posible apertura temporal. El tema forma parte de los primeros puntos de la agenda que el sector les transmitirá como inquietud a las recientemente asumidas autoridades del Ministerio de Agricultura, Ganadería, Bosque y Pesca.

Quieren tener precisiones en cuanto a cuál será la política de administración y manejo del golfo, sí la provincia asumirá su potestad de tomar decisiones o solo se limitará a aceptar lo que desde el gobierno nacional se indique.
También es cierto que como ha venido ocurriendo en los últimos años, hay presiones de diversos sectores detrás de las determinaciones respecto de las aperturas y cierres dentro del Golfo San Jorge, en la jurisdicción que le pertenece a Chubut, y no siempre ha sido exclusivamente ceñida a factores biológicos.

Por otra parte, las plantas de procesamiento de Puerto Madryn, y en menor medida Rawson y Trelew, aguardan con expectativa el desenlace de las negociaciones que mantienen el gremio de la marinería y la flota amarilla que opera en el puerto capitalino. Ya que de esas tratativas y acuerdos será el desenlace para que se dé inicio a la zafra de langostino para las embarcaciones costeras y artesanales, cuyo recurso es procesado íntegramente en tierra.

Hoy la mayoría de los trabajadores de las plantas de las empresas que dedican gran parte del negocio pesquero al recurso langostino, están cobrando los garantizados y están en sus casas sin trabajar. El momento del año de mayor movimiento y actividad todavía no ha comenzado, y depende siempre del termómetro de lo que acontece en Puerto Rawson.

Una parte importante del financiamiento de las plantas en tierra está atado al procesamiento y producción de las capturas que realizan los barcos artesanales y costeros que operan en la capital chubutense, de ahí es que se aguarda con impaciencia el desenlace de las negociaciones salariales, a la luz que una demora en poder arribar a un acuerdo postergará el inicio de la pesquería, que habitualmente ocurre en la segunda quincena de octubre.