martes, 7 de agosto de 2012

Bienestar animal en la producción avícola


En la Estación Experimental Agropecuaria del INTA de Concepción del Uruguay, en el marco del 3er Ciclo de Conferencias Técnicas en Avicultura, se desarrolló el módulo “Bienestar animal en la producción avícola”. La actividad del Proyecto del Centro Regional Entre Ríos del INTA “Incremento de la competitividad del sector avícola entrerriano”, fue organizada por el Grupo de Avicultura de la Experimental.










    Luego de realizada la apertura de la capacitación por parte de Lic. Claudia Gallinger, responsable del Grupo Avicultura del INTA de Concepción del Uruguay, la Méd. Vet. Elena Del Barrio disertó sobre “Bienestar Animal en la Producción Avícola”. A continuación se resume su exposición:
“La producción avícola ha sabido adaptarse a múltiples factores y asumir nuevos desafíos: aspectos sanitarios, medioambientales, productivos, trazabilidad, seguridad alimentaria, zoonosis, marketing; y lo sigue haciendo. En esta nueva era productiva el desafío radica en incorporar la implementación de un nuevo concepto: Bienestar Animal.
Pero, ¿qué se entiende por Bienestar Animal?  Podríamos decir que se trata de la ausencia o minimización de sufrimiento en la adaptación al medio, sin poner en marcha  los mecanismos del stress.
En condiciones naturales, los animales, están en equilibrio con el medio que los rodea pero, dado su calidad de productores de alimentos, los humanos hemos modificado este medio a los fines de poder hacer el uso económico necesario.
Es así que, muchas veces, llegan a producirse situaciones de hacinamiento, inmovilidad, ausencia de estímulos e inhibición absoluta de las necesidades etológicas de los animales, entre otras.
Mantenidas en el tiempo, estas circunstancias producen en el animal un stress que puede ser crónico, sufrimiento que termina afectando la salud y, por lógica derivación, la eficacia productiva de los mismos.
Frente a la baja en la calidad productiva existen dos claras, como diferentes posturas; Una, la que se traduce en acciones que pasan por alto este nuevo concepto que comienza a imponerse mundialmente, (corte de pico, espolones, oscuridad, etc.); y, la otra, aquella que estudia las causas que producen esta afectación a la producción así como también el comportamiento natural y las necesidades del animal, y actúa en consecuencia. Postura esta que viene imponiéndose en la mayoría de los mercados de las comunidades internacionales.
Posteriormente la Med. Vet. Paola Cardaci expuso sobre “Bienestar y Productividad en explotaciones avícolas”, expresando:
“La huella de la mano del hombre a través de la crianza de los animales, descuidando muchas veces el bienestar de los mismos, incide provocando un stress con impacto no deseado  en el rendimiento a la hora de evaluar gastos versus costos, afectando sensiblemente la calidad del producto final teniendo así un efecto negativo en la producción a través del tiempo.
Entonces nos preguntamos:
¿Cuál es el fin u objetivo? (valor agregado) = PRODUCTIVIDAD
¿Cuál es el medio?           (proceso)          = PREVENCIÓN
¿Cómo se logra?              (Procedimientos) = METODOLOGÍA
Todos los que trabajamos en avicultura sabemos de los sistemas y aparatos más importantes a nivel anatomofisiologico de las aves, es decir el aparato digestivo, aparato cardiorespiratorio, urogenital y la piel y faneras.
Sabiendo que el bienestar animal tiende a mejorar la fisiología del animal actuando como factor que armoniza el medio interno posibilitando el correcto balance hormonal y orgánico que todo ser vivo merece, entendiéndolo
                             NO como revolucionario o extraño,
                             SÍ como equilibrado y natural”.

  Más información: dbueno@concepcion.inta.gov.ar 
 


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